7 Mitos sobre la equitación

7 Mitos sobre la equitación

1.Montar un caballo es sólo sentarse

Este mito hace reír a los jinetes. También les hace desear que puedan hacer que la persona que cree esto suba a un caballo y monte una prueba de doma, o que salga a dar un paseo de diez millas por el sendero. Aquellos de nosotros que montamos sabemos que se necesita mucho más que sentarse a montar a caballo. Sentarse es algo que se hace en un sofá, pero en un caballo, se utilizan muchos más músculos, el equilibrio y el cerebro. Eso no es sentarse. Esa es una actividad que incluye muchas habilidades y conciencia corporal.

2. Sólo necesitas confiar en tu caballo

Los jinetes necesitan entender cómo piensan los caballos, y que la primera prioridad de nuestro caballo no es nuestra seguridad y comodidad, sino la suya propia. Como animales de presa, los caballos no están programados para sacrificarse a sí mismos. Los jinetes necesitan entender cómo hacer que su caballo confíe en ellos siendo siempre consistentes y buenos líderes. Si dejas que un caballo piense por sí mismo y confías en él para que tome sus propias decisiones, le estás pidiendo que sea un líder, y eso puede llevar a problemas. Ser el líder es tu trabajo. Hay muchas historias sobre caballos que han salvado la piel de su jinete a través de alguna experiencia angustiosa. Sin embargo, por muy románticas que sean estas historias, es más probable que los caballos se hayan librado de una mala situación y que los jinetes hayan podido (por suerte o por habilidad) permanecer a bordo.

3. A los caballos les gusta ser montados o disfrutar de ciertos deportes

Hay tres fuerzas motivadoras en la vida de un caballo: comer, reproducirse y buscar seguridad. Aunque algunos pueden ser trabajadores más dispuestos que otros, ningún caballo ha saltado un curso de cercas, ha salido a una larga caminata, ha realizado una prueba de doma, ha cortado ganado o ha manejado los barriles por su propia voluntad. A los caballos les gusta comer, se sienten seguros con sus compañeros de rebaño y se reproducen. Y aunque un caballo bien entrenado puede hacer muchas cosas por un jinete, es poco probable que alguna vez se ofrezca a hacer alguna de esas cosas sin que se le pregunte. A mucha gente no le gusta esto, pero a los caballos no les gusta que los monten.
¿Significa esto que no deberíamos montarlos? La desventaja de ser montado o conducido y tener su reproducción controlada es que nosotros nos encargamos de la parte de la alimentación y la seguridad de sus vidas. Todo el mundo necesita un trabajo. No a todo el mundo le gusta su trabajo. Y debido a que nuestros caballos no tienen otra opción, necesitamos asegurarnos de que estamos haciendo ese trabajo lo más cómodo posible aprendiendo a montar bien y cuidando cosas como el ajuste de la silla de montar y una nutrición adecuada.

4. Las personas que tienen miedo de montar sólo necesitan más experiencia en la comprensión de los caballos

Es un mito que las personas que no confían en los jinetes son jinetes inexpertos que necesitan entender cómo piensan los caballos. Si eso fuera cierto, entonces no habría jinetes con años de experiencia trabajando con caballos y montando caballos que de repente se dan cuenta de que han `perdido los nervios’. Ya sea como resultado de un accidente grave, o si acaba de empezar a jugar un juego de «qué pasaría si» en su cerebro, la pérdida de confianza puede ocurrirle al mejor de los jinetes. La buena noticia es que el miedo puede ser superado. Sólo puede tomar algún tiempo y ayuda externa.

5. Los Caballos Esperados son más Fáciles de Montar que los Caballos Regulares

Los caballos cebados no son más fáciles de montar que cualquier otro caballo. La única diferencia entre montar un caballo con aires de marcha, como correr, caminar o tolerar, es que es posible que no tenga que postear el trote. Esa es sólo una habilidad menos de las muchas que tendrás que aprender. Un caballo es un caballo, independientemente de su forma de andar, y usted todavía necesita un buen asiento y manos y entender su caballo para estar cómodo y seguro.

6.  El montar a caballo no es ejercicio

Una vez más, este es un reclamo hecho por alguien que no ha montado o trabajado con caballos. El objetivo del ejercicio es fortalecer los músculos, aumentar la resistencia y mejorar el equilibrio. La equitación hace todo eso, y usa unos pocos músculos, como los de la parte interior de los muslos, que pocas otras actividades hacen. El ejercicio quema calorías, y montar a caballo también se ajusta a esa necesidad. Levantar y cargar sillas de montar, asearse y pasar tiempo en la silla de montar contribuyen a su estado físico. Cabalgar también es bueno para sus órganos internos. Incluso en una caminata, hay beneficios para la salud y el acondicionamiento físico al montar a caballo.

7.La equitación es para los jóvenes y atléticos

¿La equitación es sólo para jóvenes y atléticos? Aquí hay algunos enlaces que desacreditan por completo ese mito:

  • Julie Suhr – 76 años de edad, jinete de resistencia.
  • Reina de 85 años de edad cabalga con los hijos de Eduardo
  • Montar a caballo, saltar, es la forma de hacer ejercicio para una persona de 75 años.

Publicado

en

por

Etiquetas:

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *